1 de abril de 2012

Anónimo





Quién no siente periódicamente el deseo (la tentación), de ser anónimo. Completamente anónimo. Un clon entre millones. Nadie puede dar contigo porque tu ya no estás. El viento te arrastra y eres grano de arena en el desierto.
Lástima que no fui a caer en la duna apropiada.

3 comentarios:

David Porcel Dieste dijo...

En efecto, es una tentación irresistible. El "tú" desaparece, nadie te puede reconocer, comienza el pensamiento a brotar libremente...

José Antonio del Pozo dijo...

dust in the wind, all we are is dust in the wind, es verdad, ahora con los blogs, dust in the blog. Muy bonito tu blog.
saludos blogueros

M. A. Velasco León dijo...

Disculpad por no responder a los comentarios, pero el anonimato vacacional ha sido grande.

David, mi anonimato siempre es de grano de arena, lo cierto es que uno de gota de agua, que desaparece por completo me da tanto miedo como a Unamuno la anulación de la individualidad.

Gracias José Antonio, que gran canción esa de Kansas. Veo que tiene un blog, lo visitaré.

Saludos a los dos.